sábado, 7 de febrero de 2009

Pinares en la Provincia de Ciudad Real

Actuálmente en la provincia de Ciudad Real, solo existe una única población de pinar (pinus pinaster) autóctona, al menos en su totalidad, ya que haber si que hay varias poblaciones de pinares que se utilizaron para la repoblación hace ya bastante y se han regenerado y extendido, en estos casos no se puede hablar de población natural pero si seminatural. Bueno, la población de pinus pinaster a la que me refería, es un pequeño reducto que aún se mantiene fuerte e inalterable. Se encuentra en plena Sierra Madrona, en el término municipal de Fuéncaliente, concrétamente en el Valle de Navalmanzano, a una altura de entre 900 y 1200 metros sobre el nivel del mar. Antaño, los pinares poblaron las zonas medias y altas de toda Sierra Madrona junto con robledales de quercus pyrenaica y castañares de castanea sativa, como así lo demuestran los exámenes polínicos de la zona. Ogaño, solo se conserva como ya he dicho este último bosque compuesto por unos 1.200 ejemplares que sobreviven gracias en parte al aíslamiento en el que se encuentran, puesto que se asientan sobre una zona rocosa y de difícil acceso no solo para las personas, si nó para los animales que podrian dañar los árboles, como las cabras. También están en parte a salvo del fuego, causante junto con la mano humana, de la desaparición de las demás masas forestales naturales de pinus pinaster en la zona .


Ya en la antigüedad había constancia de la presencia de estos bosques, Alfonso VIII en una delimitación geográfica se refería a esta zona: descendunt aquea de Valle maiori ad caput del Pinar



E incluso si nos remontamos a tiempos mucho más remotos encontramos vestigios de estas poblaciones, en numerosas pinturas rupestres encontradas en Sierra Madrona aparecen de manera clara dibujos que hace alusión a los pinos, como en estas pinturas de Peña Escrita. Estas pinturas datan de la Edad de Bronce y del Calcolítico:








Pero no solo hay certeza de la existencia de estos pinares en Sierra Madrona, en otros muchos puntos hay pruebas polínicas de su existencia. Por ejemplo en el Campo de Calatrava, hubo varios de estos bosques. En las proximidades del Guadiana, en la Dehesa de Zacatenas se tiene constancia de su existencia, como así lo demuestra estre escrito de una descripción de caminos en el S.XVI:


De Malagón e fasta daymiel hay cuatro leguas llanas de montes baxos e
a legua e media entramos en un pinar dicho cacatena questara legua e media
e dos leguas pasamos a Guadiana


Esta población parece que existió hasta hace no demasiado, puesto que en 1782 en unos escritos del Convento de Daimiel se citaban aunque de manera residual: 80 tirantes de pino de Cuenca de la dehesa de Zacatenas


También en las proximidades del Castillo de Calatrava (aunque no sé si Cala trava la Nueva o La Vieja) se tiene la certeza de una amplia población de pinus pinaster que permaneció viva hasta hace poco, citándose su desaparición en pleno S.XX. En los casos de los pinares del Campo de Calatrava, el hecho de que las tierras en las que se asentaban los pinares pasaran a manos particulares parece que ha sido un factor determinante.


Otros lugares de la provincia que han albergado poblaciones naturales de pinus pinaster han sido el Campo de Montiel (Villanueva de la Fuente y Ruidera), y zonas intemedias entre Montes de Toledo y Campo de Calatrava. Las sierras y montes situados en las poblaciones de Piedrabuena, Luciana y Arroba de los Montes, fueron pobladas por estos bosques autóctonos, hoy solo queda algún vestigio y las miles de hectareas repobladas.


Aunque el tema de la repoblación es algo que a mí me trae varias cuestiones. Las repoblaciones muchas veces son criticadas y también muchas veces de manera sistemática. En la provincia de Ciudad Real en concreto, muchos ecologistas critican que las repoblaciones se hagan casi siempre con pinus pinaster. Estas repoblaciones no son siempre malas, ¿es incorrecto repoblar una zona con un árbol en la que es natural? Que actuálmente ese árbol no se dé de manera natural en un lugar concreto no quiere decir que no lo sea, puede ser símplemente por incapacidad de la propia especie de regenerarse naturálmente debido precísamente a la mala acción de la mano humana que despobló en otro tiempo esa tierra. Sin embargo de la misma manera que es correcto repoblar con encinas parte del campo manchego o con robles zonas de Sierra Madrona o Montes de Toledo (y casi cualquier zona de la provincia, puesto que el quercus pyrenaica haberlo haylo incluso en la Atalaya de manera natural), pues también es correcto repoblar con pinus pinaster las zonas en las que dicho árbol es natural, y si dicho árbol es natural es porque no causa daños al ecosistema. Lo que es una aberración, es hacer repoblaciones mediante bancales, destrozando el monte y causando un gran impacto ambiental, eso sí que no es de recibo.

1 comentario:

Unknown dijo...

Saludos, soy un castellano manchego que le ha llamado la atencion tu blog...jeje, felicidades por el contenido. Y nada, era acerca de este post interesante sobre los pinares manchegos ( en la provincia de c.r) y lo ultimo que has puesto, sobre las cuestiones que planteabas...El tema de la repoblacion es complicado, no solo cuenta que la propia especie a repoblar, o a recrear de nuevo una zona, en este caso de pinus pinaster, sino múltiples factores ambientales, sobre todo térmicos, lumínicos y de precipitaciones que influyen a la hora de actuar... Independientemente de la penosa actuacion de los ministerios y las administraciones encargadas de hacerlo, si es cierto que esa especie no debería ser la estricta homogénea, aparte de pinus pinaster hay otras especies que a dia de hoy se encuentran en un mayor peligro de desaparicion ( Las encinas, quercus que has mencionado,presentes en dehesas, pero permiteme corregirte pues predominan en esta zona ilex ballota y la rotundifolia.Los alcornocales, robledales... ) y que su repoblacion significarían el dar vida y la identidad que se merece a la flora castellano-manchega, pues es la original, y la que se debería buscar.

Un ultimo apunta, la razón basica de los bancales es que el monte , a causa de la falta de vegetacion no desaparezca a causa de los factores erosivos ( lluvia, sequia...). En las repoblaciones el proceso básico en este caso sería eliminar la flora invasora ( en este caso la jara pringosa, cistus ladanifer, un autentico cancer) y replantar con las especies nuevas. El simple motivo de los bancales es que no se pierdan con la primera lluvia...y con el tiempo se moldea, y se desaparece,pero eso no lo veremos hasta... :)

Espero que te agrade el comentario, un saludo.
pablo